Gracias a estos asientos será posible viajar de pie en un avión
Volar de pie en un avión está cada vez más cerca. La empresa italiana Avionteriors acaba de anunciar un modelo de sillas con las que se puede viajar de pie en los aviones, el nuevo proyecto es llamado Skyrider 2.0. De esta manera, las empresas podrán aprovechar más el espacio dentro de la aeronave ahorrando así costes.
No obstante, la idea de que los pasajeros puedan viajar de pie no es para nada nueva. En el año 2009 la empresa china low cost Spring Airlines propuso añadir en los aviones sillas verticales a un bajo coste. Luego, en el 2012 el presidente de Ryanair, Michael O’Leary oficializó la instalación de este tipo de sillas en vuelos que no superen los 90 minutos de viaje.
Sin embargo, ahora puede estar mucho más cerca la posibilidad de poder volar de pie en los aviones. En la feria Aircraft Interiors Expo de mobiliario aeronáutico que se encuentra activa durante estos días en la ciudad alemana de Hamburgo se presentó una nueva propuesta de sillas para volar de pie en los aviones.
El modelo presentado por Avionterios cuenta con una apariencia similar al de un sillín de bicicleta, contando con un respaldo completamente vertical. Además, reduce la distancia entre los puesto, de esta manera, si por ejemplo en Ryanair hay 76 centímetros entre un asiento y el otro, el espacio para que los pasajeros vayan de pie en un avión será de 58,4 centímetros.
Es obvio que las dimensiones reducidas de las nuevas sillas complican actividades como leer o ver una película. Sin embargo, será posible estirar las piernas, puesto que en la parte inferior de los asientos existe una superficie inclinada para colocarlos. Según los ingenieros de Avioninteriors, los nuevos asientos son de «ultradensidad», permitiendo que en un mismo lugar quepan hasta un 20% más de personas.
Según el bloguero JT Center, quien tuvo la oportunidad de probar estos nuevos asientos, dice que no es para nada cómodo volar en un avión con estas sillas. Según la experiencia de Center, las rodillas se clavan contra el respaldo de delante. Lo que parece que es una buena idea para ahorrar costes y espacio, no lo es para nada en cuanto a la comodidad de los pasajeros.