Estados Unidos ordena la captura de Sam Bankman-Fried, fundador de la plataforma cripto FTX
Momentos después de darse la orden de captura formalmente contra Sam Bankman-Fried, las autoridades de Estados Unidos confirmaron su arresto en una isla de las Bahamas. Al fundador de la plataforma de criptomonedas FTX se le acusa de estafa y fraude a los inversores.
Según las autoridades, Bankman-Fried utilizó inapropiadamente los fondos de los clientes de FTX. No solo para alimentar las operaciones de la firma Alameda Research, sino también para financiar sus donaciones políticas y su estilo de vida.
Por su parte, Gary Gensler, presidente de la SEC y anterior CEO de FTX, el fundador «creó un castillo de naipes sobre una base de engaño», aprovechando la confianza generada para hacerles creer a los inversores que se trataba de la estructura más segura del ecosistema de las criptomonedas.
Y es que desde 2019, el empresario también recibió más de 1.800 millones de dólares de inversores de capital. Para ello, promocionó a FTX como una plataforma «segura y confiable» y «orquestó un fraude de años de duración», indica el anuncio.
El proceso judicial apenas comienza
Según la SEC, la orden de captura contra contra Sam Bankman-Fried se sustenta en diferentes razones que empezaron como sospecha para llevar a cabo el arresto del empresario:
Desvío de fondos de los clientes de FTX a Alameda Research.
El ocultamiento de la exposición que FTX tenía a Alameda Research, especialmente en lo relacionado con la tenencia de tokens sobrevalorados o de baja liquidez.
De esta manera, la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos ha acusado formalmente al empresario de violar las disposiciones antifraude de la Ley de Valores de 1933 y la Ley de Intercambio de Valores de 1934. Además, el organismo busca una orden judicial que impida que Bankman-Fried participe de la «emisión, compra, oferta o venta de valores», y que devuelva sus ganancias.
Después de su arresto, se espera que se emita una orden de extradición a Estados Unidos. Es probable que el proceso judicial relacionado con el escándalo de FTX lleve varios meses antes de alcanzar una solución final.
Philip Davis, primer ministro de Bahamas, aseguró que su país hará sus propias investigaciones regulatorias y criminales sobre el colapso de FTX, independientemente de lo que suceda a nivel penal en Estados Unidos.