Economía de creadores: ¿de qué se trata esta nueva tendencia que empodera a la Generación Z?
Jenny Ueberberg | Unsplash
Vivimos en un mundo altamente digitalizado, con tantas oportunidades para capitalizar las nuevas tendencias online, no es de extrañar que los jóvenes que actualmente crecen rodeados de tecnología e Internet estén a la vanguardia de estas economías emergentes. Con la llegada del Internet nacieron una gran cantidad de plataformas y mercados digitales, todos compitiendo por llamar el interés de estas mentes creativas, y de ahí surgió la economía de los creadores.
La economía de los creadores hace referencia a una amplia gama de creadores que están construyendo negocios de forma independiente para monetizar un contenido, una idea o incluso su personalidad. Junto a estos creadores independientes, existen plataformas digitales que abarcan diferentes categorías de la economía: desde plataformas para la creación de videos, hasta plataformas para vender productos caseros y otras para la creación de videojuegos independientes.
Los ejemplos que ilustran esta tendencia son múltiples, empezando por el fenómeno de los youtubers, que gracias al reparto de los ingresos publicitarios generados a través de los vídeos subidos a YouTube se hacían con dinero. Pero hoy ya se habla solo de youtubers, sino también de influencers, instagramers o tiktokers, también de streamers que utilizan con éxito plataformas de videojuegos como Twitch; de famosos que venden saludos personalizados, y de otros creadores que, a través de distintas plataformas digitales, han encontrado vías para monetizar sus contenidos.
Si bien el empleo tradicional es a menudo estresantemente competitivo y cada vez más indeseable para la Generación Z, la economía creadora ha aumentado en el momento justo para proporcionar una forma alternativa de conseguir dinero. Una oportunidad para construir algo, desde cero, para ti mismo, en tus propios términos.
Nuevas formas de trabajo
Mientras que en generaciones anteriores las oportunidades laborales más comunes para los jóvenes eran trabajos domésticos, como cortar el césped, lavar casas, entregar periódicos, etc., los de la Generación-Z han encontrado su propia forma de sacarle provecho al Internet para tomar el control de su futuro.
Innumerables influencers en plataformas como YouTube, Twitch y TikTok han hecho crecer comunidades de miles, y en muchos casos, millones, de personas que consumen su contenido como entretenimiento; y están generando grandes cantidades de dinero de estas comunidades a través de publicidad, ventas de mercancías, patrocinios, entre muchas otras alianzas que generan activos.
Los jóvenes desarrolladores de juegos están generando grandes ingresos en plataformas como Roblox mediante la creación de experiencias virtuales para sus propias comunidades de jugadores.
La gente está creando tiendas de comercio electrónico para iniciar negocios en torno a numerosas artesanías y proyectos, ya sean camisetas, velas, jabones, decoración o algo más.
Esto está llevando a un alto nivel de independencia, habilidades empresariales y desarrollo del espíritu a una edad más temprana, y lecciones clave de vida que está aprendiendo la Generación Z. Es muy probable que la próxima generación de unicornios sea fundada por personas de esta cohorte de participantes de la economía de creadores
Creadores que aportan valor a sus comunidades
En la creación de contenido en video, el tiempo que lleva crear una película o una serie de televisión es mucho, mucho más largo de lo que le toma a un influencer filmar un TikTok o un video para YouTube, y nuevamente, hay millones de personas haciéndolo, lo que significa que el flujo de contenido se actualiza rápidamente y proporciona nuevo entretenimiento para los espectadores.
Lo anterior no quiere decir que esta forma de entretenimiento vaya a tomar el lugar de las series de streaming o el cine, pero sin duda es una forma de entretenimiento que se diferencia, y que muchas personas disfrutan mucho más que el contenido que se ve tradicionalmente en otras plataformas como la tv.
Sin embargo, la economía de los creadores no gira en torno a las redes sociales ya mencionadas, sino también a otra clase de aplicativos que ofrecen experiencias para que los creadores puedan monetizar su contenido y ganar dinero, un ejemplo es SocialBee, a través de esta aplicación cualquier persona, sin necesidad de ser influencer, puede añadir tours, recorridos y curiosidades sobre cualquier lugar del mundo en el que haya estado previamente, de esta manera puede crear una comunidad y obtener visualizaciones, a cambio la aplicación le permite a esa persona monetizar sus creaciones.
A medida que la tendencia laboral continúa creciendo hacia una forma de digitalización, la economía de creadores continuará creciendo junto con ella. Las personas que de otro modo habrían estado cumpliendo tareas que en el futuro serán cumplidas por máquinas, tendrán la oportunidad de centrarse en una pasión, y esta digitalización conducirá a un trabajo más decidido para más personas.
En resumen, la economía de creadores está construida para el presente y el futuro. Está generando un trabajo con más propósito, y está abriendo nuevas oportunidades para personas de todo el mundo. Es interesante pensar qué nuevas industrias se abrirán a la economía de los creadores a medida que pase el tiempo, y qué impacto tendrá eso en la cultura.