América Latina se está convirtiendo en un mercado importante para la industria EdTech

La tecnología utilizada en la educación, o lo que se conoce como ‘edtech’, hace referencia al uso de aplicaciones y tecnología para la enseñanza y el aprendizaje, una tendencia que se hizo popular especialmente en la época de la pandemia, lo que atrajo la intención de decenas de personas que quisieron emprender en esta industria.

Según datos de JPMorgan, entre 2020 y 2021, los emprendimientos de tecnología educativa recaudaron más de 35.000 millones de dólares a nivel mundial, esto principalmente por la necesidad de implementar la adopción de la tecnología en el aula, ya que en ese momento los estudiantes no podían recibir sus clases de manera presencial. 

En el caso de América Latina, las inversiones para ese entonces fueron seis veces superiores a las de otros años.Sin embargo, la financiación de la tecnología educativa en la región sigue siendo baja en relación con las inversiones globales durante la última década, ya tan solo se han recaudado $1.000 millones de dólares en comparación con los $68.600 millones de dólares a nivel mundial.

La trascendencia de integrar la tecnología en la educación

En la actualidad, uno de los factores que impulsa la integración de la tecnología en la educación es la demanda de trabajos relacionados a la tecnología. Cerca del 67% de las empresas de la región reporta escasez de talento y dificultad para contratar personal con capacidades mínimas de tecnología. 

Otro factor que impulsa la necesidad de reducir la brecha de habilidades en la región es la tendencia en desarrollo del nearshoring. La situación que vive el mundo actualmente está influyendo en las empresas, especialmente en Estados Unidos, para trasladar sus operaciones a lugares más cercanos a sus mercados. En este contexto, América Latina se está convirtiendo en una de las opciones más atractivas para la relocalización y varios países de la región compiten por estas nuevas fuentes de empleo e inversión.

La necesidad de contratación de talento capacitado trae consigo una mayor demanda de una experiencia técnica en ciertas áreas, así como de mejores capacidades lingüísticas, lo que creará una urgencia aún mayor para cerrar la brecha de habilidades en la región. 

Como respuesta, un mercado laboral altamente competitivo alienta aún más a los estudiantes de todas las edades a desarrollar aún más diversas competencias, creando una demanda de tecnología educativa y una demanda para que las instituciones se transformen digitalmente.

Acceso a la educación con tecnología

Según datos del Banco Mundial, América Latina es el cuarto mercado con la adopción de tecnología educativa más grande del mundo y se espera que las inversiones en este mercado  aumenten de $396.000 millones de dólares a $498.000 millones de dólares en 2025.

Un ejemplo  de la creciente inversión en empresas de tecnología educativa es la reciente contribución de One Way Ventures al proyecto Buddy. Esta aplicación pionera, impulsada por inteligencia artificial, se centra en ofrecer un aprendizaje personalizado para niños, con especial énfasis en la enseñanza del inglés, aspirando a democratizar el acceso a la educación de calidad para todos los estudiantes.

Ivan Crewkov es el cofundador y CEO de Buddy. Tras mudarse a Estados Unidos desde Siberia, Ivan vio cómo su hija en edad preescolar tenía dificultades para aprender inglés. Esto le inspiró para crear a Buddy, una especie de personaje ficticio con el que los niños pueden conversar gracias al poder de la IA generativa.

La plataforma, que no deja de ser una edtech, ofrece un tutor virtual en forma de dibujo animado llamado Buddy, el robot, programado con voz de inteligencia artificial (AI-Voice). Buddy involucra a los pequeños usuarios en diálogos y juegos basados en la voz, el maestro les brinda práctica de conversación ilimitada y lleva la eficiencia de la educación al siguiente nivel.

Actualmente, Buddy.ai está disponible en la mayoría de mercados. Con esta app, los niños tendrán la oportunidad de aprender inglés de una manera entretenida, rápida e intuitiva desde temprana edad. Demostrando que el futuro de la educación está en la tecnología.